04 julio 2010

Análisis de la Revista Observatorio Polar, sobre la cooperación antártica entre Venezuela y Uruguay

COOPERACIÓN INTERNACIONAL EN LA ANTÁRTIDA: VENEZUELA Y URUGUAY EN CAMPAÑA CONJUNTA
Ver la versión original

Artículo publicado en Observatorio Polar Nº2 (Setiembre de 2008) del Centro Argentino de Estudios Internacionales (CAIE) - www.caei.com.ar

Autores:
Gabriel De Paula - Licenciado en Relaciones Internacionales - Coordinador del Observatorio Polar
Francisco Tuñez - Investigador del Observatorio Polar
mail: polar@caei.com.ar 

 © Gabriel De Paula, Francisco Tuñez, Bruno Tondini, Eugenia Alamos,
Nicolás Suarez Colman, Valeria Antonecchia, para CAEI.
Trabajo de divulgación académica – Cada autor conserva para si todos los Derechos Reservados.
Idea original y desarrollo metodológico: © Juan Recce, todos los Derechos Reservados.



El Gobierno venezolano, que encabeza Hugo Chávez, viene trabajando activamente para modificar su estatus dentro del Sistema del Tratado Antártico (STA) de miembro no consultivo a miembro consultivo. Esta última categoría le permitiría a Venezuela tener voz y voto dentro de las reuniones consultivas anuales que se realizan desde la entrada en vigencia del Tratado Antártico. Es importante tener presente que dichas reuniones y sus “recomendaciones” son una parte importante del STA al delimitar el orden jurídico-político que administra la política mundial sobre el continente Antártico.
En el marco de la política exterior venezolana se ha planteado como objetivo estratégico lograr su inserción dentro de las “relaciones internacionales antárticas” como Parte Consultiva. Para cumplir dicho objetivo ha tenido un socio particular: Uruguay. Este particularismo plantea varias preguntas sobre la asociación entre Venezuela y Uruguay en torno a la cuestión Antártica.
Antes de arriesgar respuestas debemos tener presentes varios elementos. En primera instancia si Venezuela buscaba un socio cuya capacidad logística y experiencia en la Antártida podría haber sido utilizada, cabe preguntarse por qué no se acudió a su aliado estratégico: Rusia. En segundo lugar, y siguiendo la marcada tendencia latinoamericanista de la Política Exterior Venezolana, uno puede preguntarse por qué no se aprovechó sus cercanas relaciones (en lo político y en lo económico) con la Argentina, país con sobrada experiencia en el continente. Entonces, la pregunta es ¿por qué Uruguay?
Con este caso pretendemos explicar como suelen desarrollarse las “relaciones internacionales antárticas”. Observamos un tipo particular de cooperación internacional signado por un marco jurídico que hasta la fecha se ha mantenido legítimo, delimitando las relaciones interestatales en el continente de manera dinámica, al evolucionar constantemente en torno a los debates entre sus miembros. Hablamos del Sistema del Tratado Antártico. A medida que avanza este nuevo siglo, el mundo ira cambiando, y será fundamental tener claro hasta que punto un sistema como este puede ser ejemplo de cooperación internacional o de quebrantamientos de la institucionalidad del Derecho Internacional.
Con respecto al caso particular de las relaciones entre Uruguay y Venezuela en materia antártica, presentaremos las variables:
• “Conocimiento”: conocimiento científico + conocimiento operativo: hace referencia a la capacidad de adaptación al medio particular y a la capacidad de desarrollo operacional en el mismo.
• “Presupuesto”: hace referencia a la financiación necesaria de los altos costos que conlleva una campaña antártica.
En principio realizaremos una descripción detallada de la política venezolana para con el continente blanco y luego analizaremos las relaciones bilaterales que mantuvo con Uruguay en materia de cooperación antártica.
VENEZUELA HACIA LA ANTÁRTIDA
Desde el año 1999 Venezuela es miembro del Tratado Antártico con el estatus de Estado miembro no consultor. Luego de casi de 10 años se comenzó a aspirar a conseguir un puesto consultivo para tener voz, voto y veto en las reuniones consultivas entre los países signatarios y adherentes.
En la última semana de enero de 2008 se anunció oficialmente la concreción de una expedición antártica venezolana, la cual fue coordinada por la Armada Venezolana en conjunto con la Armada de Uruguay. La expedición tuvo como objeto desarrollar investigaciones científicas en un período de 45 días. Con esta misión Venezuela busca cumplimentar los requerimientos necesarios por el STA, para que el país pueda ascender a la categoría de país consultivo dentro del mismo TA.
En virtud del Art. IX (2) “Cada una de las Partes Contratantes que haya llegado a ser Parte del presente Tratado por adhesión, conforme al Artículo XIII, tendrá derecho a nombrar representantes que participarán en las reuniones mencionadas en el párrafo 1 del presente Artículo, mientras dicha Parte Contratante demuestre su interés en la Antártida mediante la realización en ella de investigaciones científicas importantes, como el establecimiento de una estación científica o el envío de una expedición científica”. Por extensión, la obligación de las partes contratantes alcanza a los países que buscan ingresar al STA.
Ahora bien ¿existe un interés nacional venezolano con respecto a la Antártida? ¿Cuál es ese interés? Según el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC)7 Venezuela efectivamente tiene creado un interés nacional, basado en el importante valor estratégico que el continente blanco representa. Dicho Instituto ha declarado que las razones para que su país este interesado en la Antártida son que “posee más de 170 tipos de recursos minerales y energéticos; representa el reservorio de agua dulce más grande del planeta; cuenta con una importante riqueza biológica; para 1980 los lechos petrolíferos superaban los 50 billones de barriles y su posición geográfica es estratégica en el tráfico marítimo.” 8
Considerando que desde el 24 de marzo de 1999 Venezuela es un miembro adherente al Tratado Antártico es evidente que la aspiración de su Política Exterior es lograr el cambio de categoría para convertirse en parte consultiva y tener así, una mayor participación e influencia en el STA. De esta manera, las investigaciones enmarcadas en la expedición en conjunto con Uruguay por un lado, y a la creación de una Comisión Antártica Venezolana por otro son pasos tendientes a lograr dicho objetivo.

Antes de que partiera la expedición, Héctor Navarro, Ministro del Poder Popular para Ciencia y Tecnología de Venezuela, afirmó que era un proyecto de naturaleza científica. Asimismo estableció que se enviarían “15 investigadores venezolanos que estudiarán desde la flora y la fauna de la Antártida hasta temas de tipo atmosférico” con el objetivo a mediano plazo de “construir una estación experimental y científica permanente de Venezuela". Por otro lado, recalcó que la expedición solo se pudo realizar "gracias al apoyo de la República de Uruguay, el pueblo uruguayo, las instituciones científicas uruguayas y especialmente de la Armada de ese país en cooperación con la Armada venezolana". 9
La expedición estuvo al mando de un oficial naval venezolano y compuesta por quince científicos (11 civiles y 5 militares) de la misma nacionalidad, que compartieron la travesía con sus pares uruguayos en el ROU 22 “Oyarbide”, buque de la Armada del Uruguay. La misión tuvo como destino la Base “General Artigas”, en la Isla 25 de Mayo (King George según la designación británica).

Uruguay no solo brindó el apoyo logístico para la expedición venezolana sino que se introdujo al grupo de venezolanos en los aspectos técnicos (temas y reglamentos relacionados con las investigaciones y bases antárticas) y logísticos.
Este ejemplo de cooperación internacional nos aporta indicadores, que explican la forma en que se desarrollan las “relaciones internacionales antárticas”. Observamos que Uruguay tiene la variable “conocimiento”: conocimiento científico + conocimiento operativo (adaptación al medio y operaciones). Por su parte, Venezuela cuenta con la variable “Presupuesto”, necesario para llevar adelante la campaña antártica. Entre los países que integran el sistema antártico, en la actualidad solo uno cuenta con ambas variables (conocimiento y presupuesto): EE.UU. Por lo demás, los países restantes se dividen entre los que tienen conocimiento (y presupuesto ajustado) y los que tienen el dinero (y conocimiento limitado).

Resultados de la expedición: la ciencia y tecnología dirigidas a un objetivo estratégico
En Abril de 2008, tras el regreso de la expedición, el Ministro de Ciencia y Tecnología Héctor Navarro, manifestó su agradecimiento al Gobierno uruguayo por el apoyo prestado. En la expedición se realizaron estudios de tipo sísmico, hidrográfico, meteorológico, biológico y de navegación. En la conferencia de prensa, Navarro se explayó es recordar los objetivos de Venezuela en esta área, y señaló que “la motivación más importante es que la Antártica es uno de los laboratorios de mayor interés para estudiar el gravísimo proceso del calentamiento global y de deterioro de los espacios vitales del ser humano”11.
El Ministro hizo hincapié en las riquezas minerales del continente, aclarando en dicha oportunidad que “el criterio del Gobierno venezolano y de muchos otros países, es preservar esas riquezas para las futuras generaciones”. Además, hizo referencia a otro recurso de creciente valor estratégico: el agua dulce. Dijo que “en la Antártida se encuentra el 80% de las reservas de agua del mundo, de tal manera que si se derritiese la pérdida para la humanidad sería catastrófica”. En el mismo sentido el Ministro Navarro dijo que la disponibilidad de agua dulce en la Antártida podría causar una confrontación a futuro. Es importante esta última parte, en tanto da cuenta de la orientación que Venezuela dará a sus investigaciones futuras.
La expedición desarrolló también estudios sobre los ecosistemas y los procesos evolutivos de la vida en el planeta, relacionados con los efectos del calentamiento global y el deterioro de la capa de ozono.
Por último, el Teniente de Navío Arturo Carmona, adscrito a la Dirección de Hidrografía y Navegación de la Armada y coordinador logístico de la expedición venezolana, agregó que se realizó un relevamiento en un área desconocida, lo cual significa un aporte significativo para la cartografía en el ámbito internacional. La expedición venezolana, en síntesis, buscó trabajar en un área geográfica no estudiada todavía por otros países, buscando brindar a la comunidad científica internacional un aporte sustancial, con vistas al objetivo estratégico del gobierno venezolano: ingresar como miembro adherente al Sistema del Tratado Antártico
Financiamiento de la expedición: la participación de PDVSA
Según el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas12 (IVIC) la operación antártica costó aproximadamente 1,945 millones de bolívares fuertes, es decir que se invirtieron unos 905 mil dólares para la campaña.
Del total de recursos, 1,3 millones de bolívares fuertes fueron pagados por el Ministerio del Poder Popular para la Ciencia y Tecnología (MppCT) y destinados a la compra de equipos y pasajes, pago de viáticos, adquisición de vestimenta adecuada y cancelación de seguros médico para los expedicionarios. Por otro lado, los 645.000 de bolívares fuertes restantes fueron otorgados por el Ministerio del Poder Popular de Energía y Petróleo y se destinaron a la compra de combustible y la preparación del buque uruguayo
Un dato de interés, es que la campaña antártica también fue financiada por PDVSA (Petróleos de Venezuela S.A.), a través del INTEVEP13. Asimismo, esta última empresa, puso a disposición de la campaña su plantilla de expertos y científicos en materia de estudios ambientales. Nos preguntamos por qué es la petrolera estatal la que financia la expedición al Continente Antártico. La respuesta tiene algunas aristas, algunas más “filosas” que otras. La primera es que INTEVEP es un organismo del Estado con especialistas en el área, y como tales pueden participar a requerimiento del gobierno en los estudios antárticos. En segundo lugar, PDVSA cuenta con fondos provenientes de la explotación del petróleo, los cuales financian buena parte de la política pública en todas sus áreas (educación, defensa, exterior, etc.). Una porción de estos fondos se destinan a la campaña antártica, en tanto es una política pública más en la gestión de gobierno. Por último (y esta es la consideración que da lugar a debate) una hipótesis (de baja probabilidad) es que PDVSA tenga intereses en prospección de hidrocarburos, con un objetivo de largo plazo, pero sobre el que algunos países estarían trabajando.
Para finalizar, respecto del financiamiento, vale aclarar que PDVSA maneja un fondo rotatorio de USD 2.000 millones, provenientes de los excedentes petroleros. A través de la filial Palmaven, se destinan fondos para impulsar el desarrollo de las políticas sociales. En este marco, PDVSA destina recursos (del fondo citado u otras fuentes) a la política antártica. Con esto queremos ilustrar que la petrolera participa activamente en áreas ajenas a su función específica, que es la producción de petróleo.

COMISIÓN ANTÁRTICA VENEZOLANA
Hemos planteado ya el primer pilar de la estrategia venezolana hacia el continente Antártico, es decir, la orientación de una política tendiente a la generación de campañas antárticas que justifiquen a nivel del Sistema del Tratado Antártico en particular, y a nivel internacional en general, el cambio de status de Venezuela dentro del Tratado Antártico.
El segundo pilar14 de esta política se encuentra en la creación de una agencia estatal que coordina a los actores interesados canalizando los recursos financieros, humanos y logísticos necesarios intra - estatalmente (hacia dentro del Estado) e inter - estatalmente (con otros Estados, en este caso antárticos) para lo concreción del objetivo estipulado.
Para cumplir esta misión Venezuela creó15 la Comisión Presidencial Antártica o Comisión Antártida Venezolana. La misma esta conformada por 6 ministerios y se encuentra adscrita a la Vicepresidencia de la República. Los ministerios que la componen son: el de Defensa, el de Ambiente que cumple la función de Secretaría General, el de Ciencia y Tecnología que será la coordinadora y rectora de la comisión, el de Energía y Petróleo, el de Planificación y Desarrollo y finalmente el de Relaciones Exteriores.
14 Es necesario remarcar que la separación en pilares es establecida en orden de lograr una explicación acabada del proceso que se esta llevando a cabo dentro del Estado Venezolano ya que en la realidad ambas categorizaciones están estrecha y directamente relacionadas.
La comisión tiene como objetivo principal el asesoramiento del Poder Ejecutivo en lo referente a las decisiones y acciones necesarias para la investigación “ecológica internacional de la Antártida”. En el texto se expresa que la necesidad del Estado a inmiscuirse dentro del ámbito científico internacional responde a las necesidades de responder los cambios climáticos globales. Asimismo les permitirá trabajar en conjunto con las casas de altos estudios dedicadas a investigar en el área.
De esta manera el Estado venezolano ha asumido la elaboración de una política oficial en materia antártica que busca por un lado fomentar las investigaciones científicas y los trabajos técnicos con fines pacíficos sobre el tema Antártico y por otro lado proponer en la agenda antártica el cambio de estatus necesario para que Venezuela tenga voz, voto y veto en el STA.
LAS COOPERACIÓN ANTARTICA: ¿POR QUÉ URUGUAY?
Como vimos con anterioridad Uruguay brindó el apoyo logístico y técnico para que la expedición venezolana se pudiese concretar. Planteamos que este ejemplo de cooperación internacional nos aporta indicadores, que explican la forma en que se desarrollan las “relaciones internacionales antárticas”. Observamos que por un lado Uruguay dispuso su “conocimiento” es decir el conocimiento científico sumado al conocimiento operativo. Mientras que por el otro lado, Venezuela brindó el financiamiento necesario para llevar adelante la campaña antártica.
Ante los hechos nos preguntamos ¿por qué el gobierno de Uruguay, que no mantiene una relación bilateral estrecha con el gobierno venezolano, ha llevado a cabo un viaje extraordinario a la Antártida en uno de sus buques con militares y científicos venezolanos a bordo?
En el año 2005, la viceministra de Investigación e Innovación del Ministerio de Ciencia y Tecnología de Venezuela visitó en dos ocasiones el Ministerio de Defensa uruguayo. En conversaciones sobre el tema antártico ambos funcionarios plantearon la posibilidad de apoyar la ejecución conjunta de expediciones antárticas que favoreciesen a ambos países. En dichas reuniones se acordó que la Armada uruguaya pondría a disposición del gobierno de Venezuela la experiencia acumulada en investigación en el continente antártico a cambio de que dicha campaña fuese financiada por el gobierno del país caribeño.
En este sentido se creo una relación bilateral entre las armadas de ambos países sudamericanos. En el año 2006 una Ley autorizó la salida del territorio uruguayo del buque militar Oyarvide16 para que participase en los actos de conmemoración del Día de la Armada de Venezuela. Asimismo se realizaron actividades de investigación en el espacio acuático jurisdiccional de ese país. Sin embargo, cabe remarcar, que dicho viaje fue criticado por la oposición uruguaya ya que en ese momento, la Armada uruguaya recibió como pago combustible y lubricantes a cambio de una tarea de relevamiento para la empresa estatal de petróleo venezolana PDVSA.
En una segunda visita, Orihuela acudió con el encargado de temas antárticos de Venezuela y para el 2007, un almirante de ese país viajó a Uruguay para definir los detalles de la campaña antártica que inició Venezuela en los primeros meses del 2008. Como vimos con anterioridad dicha expedición fue histórica para Venezuela debido a que representó su primera campaña científica hacia la Antártida.
Sin embargo, a medida que avanzaron los planes de una cooperación en materia antártica en Uruguay se generó una importante controversia política, especialmente cuando el gobierno solicitó la autorizaron parlamentaria para enviar al buque Oyarvide a una campaña antártica financiada por el gobierno venezolano.
Se planteó que la operación constituía un factor de presión a favor del ingreso de Venezuela como miembro consultivo del Tratado Antártico lo cual, significaba un gesto político complejo del gobierno uruguayo para con el venezolano. En definitiva la preocupación de la oposición uruguaya se centró en el significado político que dicha cooperación teniendo en cuenta la situación regional. Se consideraba que se transcurría un momento difícil, ya que por un lado Colombia y Venezuela se encontraban en plena tensión “pre bélica" y por otro lado la cooperación se proponía unos días después de que el Presidente Chávez había planteado la conformación de fuerzas armadas regionales.
Finalmente se llevó a cabo la expedición conjunta entre Uruguay y Venezuela, pero ese principio fue también el fin de las relaciones antárticas entre ambas naciones sudamericanas. Los acontecimientos demuestran como se mezclan los intereses nacionales y las líneas de política estratégica, con la política partidaria. La discusión tuvo como centro la Estación Científica “Teniente de Navío Ruperto Elicheribehety”, la cual fue inaugurada en 1997. La misma está ubicada en la Isla Rey Jorge, a considerable distancia de la Base Artigas. El debate en Uruguay sobre la cesión de la estación o su operación conjunta se intensificó y terminó por congelar las relaciones de cooperación antárticas con Venezuela cuando se comenzó a debatir el paso subsiguiente a la expedición conjunta.
En línea con lo planteado en el párrafo anterior, el Embajador uruguayo en Venezuela reveló la supuesta intención de Uruguay de ofrecer a Venezuela dicha base que posee en la Antártida en estado de inactividad. Según la información disponible, la base puesta a disposición se encuentra cerrada por falta de presupuesto. Sin embargo, días después, el ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Gonzalo Fernández, desautorizó al referido Embajador. El Canciller afirmó que “el gobierno uruguayo no cederá a Venezuela ninguna de las dos bases que tiene en la Antártida como había planteado hace días el embajador uruguayo en Venezuela, Gerónimo Cardozo”17. No obstante estas declaraciones, el Canciller uruguayo dijo que el Ministerio de Relaciones Exteriores no había recibido ningún pedido formal en ese sentido, y se refirió a las restricciones presupuestarias por las cuales la base está cerrada.
Las declaraciones tomaron estado de discusión política, y trascendieron al Poder Ejecutivo uruguayo. En efecto, el diputado del Partido Blanco Javier García, dijo: “Nos da mucha tranquilidad la afirmación del ministro de Relaciones Exteriores porque es la voz del gobierno oficial, pero nos preocupa mucho que un embajador de Uruguay que depende del canciller haya hecho declaraciones públicas hace pocas horas atrás diciendo que se le iba a ceder en algún tipo de circunstancia una de las bases uruguayas en la Antártida”18. En las mismos dichos, el diputado García afirmó que Venezuela debe suscribir el protocolo de Madrid, que compromete la defensa del medio ambiente en la Antártida, antes de que se repita la experiencia entre ambos países. En este sentido, en el acto de reconocimiento de los integrantes de la expedición (el Presidente Chávez los condecoró en el Palacio de Miraflores) dijo que “una de las expectativas contempladas fue incorporar al ordenamiento jurídico venezolano la normativa que regula el Tratado Antártico y de manera inmediata el Protocolo al Tratado Antártico sobre Protección del Medio Ambiente y a sus anexos, mediante la aprobación y ratificación por parte de la Asamblea Nacional”19.
Cooperación en otras áreas
En los estudios de relaciones internacionales son importantes las herramientas analíticas. Entender o tratar de explicar la dinámica de la política internacional es una tarea compleja, es decir, que cuando se analiza un hecho específico, este no debe abstraerse o separarse de otros hechos. Para el caso que nos ocupa, incluimos en nuestro análisis la “vinculación de cuestiones”, que metodológicamente nos permite encontrar puntos de contacto (algunos poco evidentes) entre políticas y relaciones bilaterales entre Uruguay y Venezuela.
Hecha esta aclaración, vamos a los hechos concretos. En el mes de Octubre de 2008 se lanzó el satélite VENESAT-1 “SIMÓN BOLIVAR” desde el Centro de Satélites de Xichang, en China. El mismo, es un satélite geoestacionario de comunicaciones, construido por la empresa China Great Wall Industry Corp. Uruguay entra en el proyecto por la cesión de la órbita que utilizará. La misma es geoestacionaria (78° Oeste) a 36.000 Km de la tierra. La señal de 1.300 megahercios (MHz) hará que sus emisiones cubran el continente americano desde el sur de México hasta la mitad de Argentina y Chile. Su vida útil está estimada en 15 años. La asociación con Venezuela, es nuevamente por restricciones presupuestarias en el programa aeroespacial de Uruguay. Este país optó por ceder a Venezuela una de las dos últimas órbitas hemisféricas que le restaban, a cambio del 10 % de la capacidad de transmisión del satélite.
En el mes de Julio de 2008, el Comandante General de la Aviación de Venezuela, Berroterán Acosta, recibió al Embajador de Uruguay, el Brigadier General (R) Gerónimo Cardozo. En la reunión, se abrió la posibilidad de sellar acuerdos e intercambios de profesionales entre las fuerzas aéreas de ambos países.
En ambos ejemplos encontramos puntos de contacto. En el caso del satélite conjunto, vemos que las restricciones presupuestarias generan acuerdos de cooperación entre los actores. En el segundo ejemplo, que existe cooperación militar. En este último punto, recordemos que la expedición a la Antártida es realizada en conjunto por la Armada Uruguaya y la Armada Venezolana.
A principio del artículo nos hicimos la pregunta de ¿por qué Venezuela elige para cooperar a Uruguay?, en este apartado, estamos obligados a realizar la pregunta en sentido contrario, ¿por qué Uruguay elige a Venezuela? Queda claro que una de las razones es presupuestaria. En segundo lugar podemos inferir que hay cuestiones relativas al equilibrio regional. La dependencia de Uruguay con Argentina y Brasil es alta. Ambos países cuentan con desarrollo aeroespacial de avanzada para la región, y experiencia en la campaña antártica, pero son socios que agregarían dependencia, dada una relación con Uruguay en esos ítems. Por esto, la relación con Venezuela debería ser analizada como una diversificación en las alianzas de Uruguay, que tiene por objetivo una mayor interdependencia con terceros actores, y equilibrar su propio equilibrio de poder en la región.

CONCLUSIONES
Vimos como el Gobierno venezolano viene trabajando activamente hacia el objetivo estratégico de lograr su inserción dentro de las “relaciones internacionales antárticas”modificando su estatus dentro del Sistema del Tratado Antártico (STA) de miembro no consultivo a miembro consultivo. De esta manera ha orientado su política exterior en la materia para cumplir dicha meta.
Para ello ha creado una agencia gubernamental bajo la esfera del Poder Ejecutivo con el objeto de asesor al mismo en lo referente a las decisiones y acciones necesarias para cumplimentar una política antártica a nivel estatal. La misma les permitirá a los ministerios de Defensa, Ambiente, Ciencia y Tecnología, Energía y Petróleo, Planificación y Desarrollo y finalmente el de Relaciones Exteriores trabajar en conjunto.
Por otro lado ha enviado una expedición científica para la cual ha tenido como socio al Uruguay. Cuestión que plantea varias preguntas sobre la asociación entre Venezuela y Uruguay en torno a la cuestión Antártica, si consideramos que sus relaciones bilaterales en otros ámbitos no han sido muy fructíferas. En este caso se puede entreverse como las relaciones internacionales militares, en este caso entre las marinas de ambos países pueden ser esenciales para que un Estado logre objetivos políticos estratégicos. En este caso la Marina Venezolana logró el apoyo logístico y operativo para la expedición de su país y por otro lado la Marina uruguaya logró realizar una expedición extraordinaria financiada por Venezuela.
Finalmente con el estudio de este caso hemos visto la estrecha relación que existe entre la política exterior de un país y el ámbito de la Ciencia y la Tecnología para justificar movimientos estratégicos en el marco del escenario internacional.

Notas al pie
7 Fuente: “La Antártida no está tan lejos” (IVIC). http://www.cantv.net/ciencia/resena.asp?id=161208&cat=2&Fresena=TRUE
8 Fuente idem.

9 Fuente: Radio Nacional de Venezuela 11 Febrero 2008 “Presidente Chávez despidió primera expedición venezolana hacía la Antártica”.
10 Fuente: Dpto. Prensa de la Aviación Militar “Aviación militar llegará a la Antártida” 22/1/2008


11 Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología. “Llegó al país expedición de científicos que viajó a la Antártida”. 03 de Abril de 2008. Disponible on line: www.mtc.gob.ve
12 Fuente: http://www.cantv.net/ciencia/resena.asp?id=161208&cat=2&Fresena=TRUE
13 Según el sitio oficial de PDVSA (www.pdvsa.com) INTEVEP es la empresa filial de PDVSA cuya orientación estratégica es generar soluciones tecnológicas integrales, con especial énfasis en las actividades de Exploración, Producción, Refinación e Industrialización.

14 Es necesario remarcar que la separación en pilares es establecida en orden de lograr una explicación acabada del proceso que se esta llevando a cabo dentro del Estado Venezolano ya que en la realidad ambas categorizaciones están estrecha y directamente relacionadas.
15 Gaceta Oficial 38.845 del 8 de enero de 2008.

16 El Oyarvide es un buque de la Armada Uruguaya equipado con tecnología de última generación. El mismo es utilizado como medio para las campañas antárticas uruguayas. Asimismo la tecnología que tiene le permite explorar el fondo oceánico para delimitar la plataforma continental.
17 Ministerio de Defensa de Uruguay. “Uruguay niega cesión de una base antártica a Venezuela”. 28 de Noviembre de 2008. Disponible on line: www.mdn.gub.uy
18 Ministerio de Defensa de Uruguay, Op. Cit.
19 Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología. “Presidente Chávez reconoció labor de expedición venezolana que visitó la Antártida”. 22 de Agosto de 2008. Disponible on line: www.mtc.gob.ve

No hay comentarios.: